Segundo acuatlón del año, esta vez con Miguel, que está por España este mes de julio, y primer acuatlón en formato “estándar” (pues el de relevos de Rota tiene un formato distinto): correr, nadar y correr de nuevo.
El circuito de carrera a pie iba en paralelo al Guadalquivir, saliendo del
puente de Triana (o puente Isabel II), en dirección sur por la calle Pureza
(paralela a la calle Betis), y vuelta por la propia calle Betis. Tendría unos
1.100 metros a los que había que dar dos vueltas en cada sector, más luego la
distancia hasta llegar al box, que completaba los 2.500m.
Miguel y yo nos aseguramos de tener todo el material a punto y, como
calentamiento, dimos una vuelta al circuito de carrera a pie (sin saber que era
por ahí exactamente). Antes de la salida vi a varios camaleones, entre ellos
Lorenzo, el cual se presenta y me desea suerte.
Se da la salida y Miguel y yo decidimos hacer juntos esta primera parte.
Comenzamos sin ir a tope, y al kilómetro empezamos a sentirnos mejor, siendo la
segunda vuelta de este primer sector más rápida que la primera. Llegamos a la
T1 juntos, transición rapidísima, y de cabeza al agua a nadar.
600 metros para los no federados (corrí en no federados porque Miguel no podía correr en federados), una distancia que se puede nadar casi a
fondo. Me centré en no perder a Miguel de vista, y le mantuve el ritmo durante toda
la natación, todo un reto para mí (luego para hundirme en la miseria me dijo
que había ido rascándose la barriga…¬¬), y salimos juntos a la T2. Decidimos
correr juntos la primera vuelta de la segunda carrera a pie también, aunque
ahora íbamos algo más lentos por el cansancio de la primera parte.
Al comenzar la segunda vuelta, le digo a Miguel “al girar te vas a ir
dejándome tirado, Y LO SABES”. Así fue, pegó un tirón increíble al que yo no me
vi con fuerzas para reaccionar. Yo también aumenté un poco el ritmo en esos
últimos 700 metros hasta la meta.
Llego a meta (atragantándome por la estupidez de intentar beber agua cuando
me quedaban menos de 100 metros xD), y paro el crono en 37’49’’. Una prueba
corta y con un formato muy divertido, que espero repetir en años sucesivos.
La clasificación final arroja unos ritmos de 5’06’’ y 5’21’’
respectivamente en las dos carreras a pie. Bastante satisfecho, y sin rastro de
ampollas (hay que decir también que era poca distancia). Pero lo que más me
sorprendió fue mi sector de natación. En una carrera en la que mi puesto fue el
89 de 121, hice el 54º mejor tiempo en la natación, siendo claramente mi mejor
sector en comparación con los demás competidores, desde mitad del año pasado.
Ahora el siguiente reto, si todo va bien, es volver a Posadas, al Califas de Hierro, a intentar mejorar mi tiempo del año pasado (1h32’). En teoría nado
mejor, pero mis sectores de bicicleta y a pie son una incógnita y dependerán de
lo que pueda entrenar en este mes que falta hasta la prueba. Aún así, debería
ser capaz de superar el ritmo de 5’44’’ que llevé el año pasado en carrera a
pie.
Muy buena JD.
ResponderEliminarLa cuestión es seguir progresando. Tirón de orejas por exceso de compañerismo,... debiais habeos picaos entre ustedes hasta sacaos las "túrdigas" jajaja
Yo era mi primer Acuatlón y disfruté muchísimo. El formato con los dos tramos de 2,5km es muy explosivo pero resulta llevadero. Yo tb espero repetir con o sin el "muslitos"!
Gracias por tu comentario Jose!
ResponderEliminarUpdate: no bajaré de 5'44'' en Posadas porque no podré ir. Sin próximo reto deportivo en mente de momento.